“Me he ganado la vida haciendo canciones de una forma modesta”

¿Qué tal la acogida de “Una canción de cuna entre tempestades”?

Bien, en cuanto a escuchas en las plataformas de streaming, muy bien. Es de los discos que más están sonando. Ahora, con plataformas como Spotify for artist puedes verlo. Lo sigue escuchando mucha gente, aunque no estamos tocando mucho. Muchos de mis músicos tocan en otras bandas y es complicado ponernos todos de acuerdo. También me apetece tocar un poquito menos, porque no he parado estos últimos años. Prefiero estar más a gusto con las cosas que haga, cosas puntuales, que me llenen. Estoy en ese proceso. Si sale un disco, con hacer 15 conciertos en un año y medio está bien. Mover una banda es un trabajazo, y yo hago de tour manager, conduzco… Prefiero calcular las cosas y preparar un repertorio más guay.

Tus fans han respondido muy bien.

Sí, y no es un disco fácil. Es un disco mucho más denso que los anteriores, pero en los bolos, cuando toco las canciones nuevas, veo que ha llegado bien a los fans. Ves que la gente se empieza a emocionar con las canciones más cercanas que con la antiguas. Siempre le he pedido un esfuerzo al oyente, y hay discos como Libre Asociaciónque pueden estar un poco tapados, porque el cambio fue muy drástico, que antes no gustaban y ahora hay gente a la que le gusta mucho.

“Tinieblas, por fin” por ejemplo, que es mi favorito.

Es de las cosas guays que me quedo de esta historia. También, porque entiendes este concepto: cuando descubres a un artista, con un disco X, realmente ese disco te marca mucho y es tu referencia. Ese tipo que ha escrito las canciones, al cabo de dos o tres años, sigue siendo la misma persona, pero le han pasado otras cosas; está con la mente abierta a otras historias y va por otros derroteros. Es lo difícil que ofrece el artista.

Me parece una virtud que el artista que te guste te sorprenda.

Ojo, la gente piensa que todos los discos de Ramones son iguales, y no es así. Si escuchas los discos de los 70, que son muchos seguidos y tienen un bloque definido, es diferente al de los 80. El grupo se endurece y prueba cosas. Es una lucha contigo mismo, cuando estás escribiendo. Hacemos esto porque sabemos hacerlo y nos gusta, pero tiene un punto de fantasía. Cuando ves a tanta gente en un bolo, piensas, y lo digo desde el humor, “¿qué hago aquí?”. Es muy curioso hacia dónde te lleva todo, y con la gente que te sigue pasa lo mismo, te vas reencontrando.

¿Has notado el salto al sacar este disco con una multinacional como BMG?

Sí, sobre todo a nivel de escuchas y de difusión y distribución. Trabajan muy bien. Es la primera vez que saco un disco y lleva alrededor de 800.000 escuchas. Un disco que no es comercial, y por eso me parece muchísimo.

Escuché en una entrevista que decías que Libre Asociación había marcado el camino por el que querías discurrir en la música.

Era una apuesta muy arriesgada. Sucedió ese momento en la vida en el que tienes 3 o 4 caminos que puedes escoger, y decides escoger uno. Y escogí el que no me condicionaba, porque quizás si hubiera escogido otro ahora estaría ganándome la vida como otros compañeros que empezaron en mi misma época, y que están haciendo algo muy válido. Pero yo no quería condicionarme, porque yo esto lo hago como un juego conmigo mismo, y disfruto cuando estoy inventándome los discos, viéndolo crecer. Hago yo todo, es mucho curro, pero tiene ese punto de competición absurda contigo mismo. Yo no quería dejar de pasármelo bien haciendo esto, porque sí, podría tener más ventajas logísticas y económicas, pero condicionaría, tal como entiendo yo, ciertas cosas a las que no quería renunciar. Escogí ese camino y fueron tres años de conciertos con poca gente. Pero, años después, a la gente le gusta esos discos. Estaba buscando mi forma de escribir y cantar en castellano, y ahora hay una forma de grabar y arreglar los discos que es a mi manera.

¿Si no lo hubieses sacado con BMG, hubiera salido el disco?

Sí, si hubiera salido a la luz. Quise sacarlo con ellos porque su oferta era muy buena, y al final es como autoeditado, con un canal de distribución brutal y trabajando con gente muy buena. Es una multinacional moderna, con un equipo muy válido. Son gente joven, a la que le gusta el disco y conocían mi carrera. Se agradece, porque he tenido mucha más difusión con la paradoja de que he tocado menos (risas). Hay que saber adaptarse a cada momento, y yo tengo mucha suerte porque me gano la vida haciendo canciones. Lo que sí he hecho es ganarme la vida haciendo canciones de una forma modesta, porque me siento mejor con x dinero al mes.

Al final, es como la manera más honesta de hacer lo que quieres y vivir de la música…

La tiranía del dinero es que cuanto más dinero ganas, más dinero gastas. Y no todos sabemos tener dinero, y yo soy un poco desastre. Prefiero hacerlo con una pequeña estructura, en la que facturamos un dinero al año, y entre lo que yo trabaje y lo que trabaje mi pareja vivamos bien.

Cada vez intento salir menos en mis videoclips, solo con algún cameo. Estoy cansado de mi cara (risas). Y más con esto de las redes sociales, todo el mundo vendiendo su puta moto. Ahora estoy subiendo dibujos a Instagram. Lo que quieres es pasártelo bien y estoy un poco saturado del que se venda el éxito, de los grupos diciendo bolo tras bolo que han hecho sold out.

Eso genera mucho estrés en el artista, rollo “no he llenado”, ¿no?

¡Que no pasa nada si no llenas! No tienes por qué estar llenando continuamente. En ese concierto que dices está la gente a la que flipa el grupo. El concierto en el que he tocado ante más gente fue en un festival, con 6.000 personas o algo así, y moló mogollón. Pero eso no deja de ser una cosa que pasa un día, en un artista como yo, y al día siguiente estás tocando en un bar. Tienes que disfrutarlo, pero estando en tu sitio. Me sabe mal por gente que tiene grupos porque están agobiados porque no han llenado un bolo, y no saben si van a poder vendérselo a los festivales. Es un rollo de mercantilizar la música, que hace que te agobie algo que hacemos por puro romanticismo.

Vuelves a Murcia, ¿cómo te trata la gente y la ciudad?

Muy bien, siempre se portan muy bien y tengo muchos fans. El Levante, Galicia y Madrid son geniales conmigo.

Fotos: Barita Estudio para El Arte Se Toca de Murcia Inspira.

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